
El Templo Votivo de Maipú, también conocido como Santuario Nacional de Maipú, es uno de los templos católicos más importantes de Chile. Como indica su nombre, se encuentra en la comuna de Maipú, en Santiago, y es un espacio clave tanto para la vida religiosa como para el turismo cultural. Y es que su imponente tamaño, su historia centenaria y las vistas desde su mirador lo han convertido en uno de los destinos más visitados de la zona.
Abre todos los días y sus misas suelen celebrarse a las 12:00 y a las 19:00 h, así que tienes varias oportunidades para visitarlo. Además, llegar es muy fácil: la estación Plaza de Maipú, de la línea 5 del metro, te deja prácticamente en la entrada. Y si prefieres ir en micro, hay varias líneas que te dejan a pocos pasos como la 108, 118, 421, I01, I05 y I10.
¿Cuál es la historia del Templo Votivo de Maipú?
Para entender la historia del Templo Votivo de Maipú, hay que volver al año 1818. Chile estaba en plena lucha por su independencia y la Batalla de Maipú fue el punto de inflexión. Con esa victoria, se consolidó el proceso independentista y por eso Bernardo O’Higgins prometió construir un templo en honor a la Virgen del Carmen, a quien los patriotas consideraban su protectora en la batalla. Hoy, sigue siendo un espacio para la devoción de esta virgen y cada 16 de julio, miles de personas se acercan para celebrar su festividad y mantener viva una tradición que nació junto a la historia de Chile.
4 datos curiosos sobre el Templo Votivo de Maipú
1. Debajo del templo se esconde un museo
Pocos saben que bajo el Templo Votivo de Maipú hay un museo abierto al público. Se trata del Museo del Carmen de Maipú y está en la cripta del templo. Ahí se pueden ver objetos coloniales, piezas religiosas y un mural de la ya mencionada Batalla de Maipú pintado por Pedro Subercaseaux.
2. Es la iglesia más alta de Chile
¿Por qué impresionar solo por su historia cuando puede hacerlo también por sus dimensiones? Con 91 metros de altura, estamos hablando de la iglesia más grande de Chile. Su gran cruz mide nada menos que 18 metros, pero quizás lo más sorprendente es su mirador a 63 metros de altura, al que se puede llegar en ascensor o subiendo (si te atreves) sus 323 escalones. El esfuerzo tendrá su recompensa porque como ya te puedes imaginar, desde ahí las vistas a Santiago son simplemente espectaculares.
3. Es escenario de conciertos a la luz de las velas
Aunque fue pensado para la música sacra, hoy el Templo Votivo de Maipú también abre sus puertas a conciertos tan especiales como los de Candlelight. De hecho, ha sido la primera iglesia en toda Latinoamérica de habla hispana en acoger esta experiencia musical, donde el público escucha su música favorita bajo la luz de miles de velas.
4. Su construcción tardó más de un siglo
El Templo Votivo Maipú no se levantó de la noche a la mañana. Desde la promesa de Bernardo O’Higgins hasta la inauguración del templo actual en 1974 pasaron más de 150 años. Sí, más de un siglo de pausas, cambios de planes, terremotos y falta de recursos que congeló la obra por décadas. Fue recién a mediados del siglo XX cuando se retomó con fuerza el proyecto y por fin abrió sus puertas como lo conocemos hoy.